Trenzaba el paseíllo en la
Maestranza con los cohetes en el horizonte que marcaban la llegada de las
carretas del Rocío a Triana. El ambiente festivo del exterior no caló en el
contenido del festejo que estuvo marcado por el poco juego del encierro de Soto de la Fuente.
Aquilino Girón saludó a su primero con una larga cambiada en el
tercio junto con un ramillete de verónicas y una media de rodillas. Destinado ya daba indicios de la
carencia de fuerzas, pero fue la costalada tras salir del caballo la que
sentenció las condiciones del animal. Comenzó con pases por alto con un novillo
que tomaba la muleta con nobleza. La falta de transmisión y acople fueron la
tónica de una faena sin brillo.
A portagayola se fue a recibir al
cuarto, cuya muerte brindó a su apoderado y banderillero Ecijano II. Volvió a echar rodillas a tierra para iniciar su labor
mostrando predisposición. El de Soto de
la Fuente se rajó y el granadino aguantó miraditas de su oponente, que lo
volteó sin consecuencias.
Un calvario pasó Parrita y su cuadrilla con un manso en
letras mayúsculas que saltó en segundo lugar. Gitanito huía de los caballos y correteaba por la plaza al libre
albedrío. Muy peligroso fue el tercio de banderillas en el que se mascó la
tragedia cuando Pedro José Mariscal
fue cogido contra el burladero. Todo quedo un gran susto. Brindó a Octavio Mulet en agradecimiento por
haberlo atendido cuando el pasado mes de julio sufrió un percance en las
novilladas de promoción. Nada pudo hacer el murciano que terminó volando entre
los pitones del novillo de manera muy fea. Muy mermado se eternizó con los
aceros.
El quinto fue el ejemplar que dio
más opciones del festejo. Parrita
consiguió dejar muletazos aislados con temple, porfiando por el derecho aunque
el mejor pitón fue el izquierdo.
Pablo Páez hacía su debut con los del castoreño con Mañoso, al que recibió con unos bonitos
lances a la verónica y fue muy castigado en varas. Se mostró seguro en el
último tercio firmando detalles de calidad. La música sonó tras unos primeros
compases ligados. Posteriormente, todo se diluyó y acabó con un pinchazo y una
estocada delantera.
El rondeño se topó con otro manso,
orientado y con peligro para cerrar la noche. Mientras ponía voluntad en el
ruedo, el público, al igual que ocurrió la semana anterior, se marchaba de la
plaza.
Ficha del festejo
Plaza de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Décimo
octava de abono. Un tercio de entrada.
Novillos de Soto de
la Fuente bien presentados, mansos y descastados en líneas generales.
Aquilino Girón
(blanco y plata): silencio y silencio.
Cristóbal Ramos
"Parrita" (rioja y oro): silencio tras dos avisos y silencio tras
aviso.
Pablo Páez (grana
y oro): silencio tras aviso y silencio.